
La reforma laboral en Colombia: una mirada crítica al enfoque actual
La discusión sobre la reforma laboral en Colombia se ha convertido en un tema recurrente en el ámbito político y social. Si bien existe consenso sobre la necesidad de actualizar las normativas laborales, el enfoque actual del gobierno ha sido objeto de críticas por centrarse exclusivamente en el empleo formal, dejando de lado a una gran parte de la población trabajadora.
Según datos recientes, el 57% de los trabajadores en Colombia se encuentran en la informalidad, desempeñando labores sin contratos, prestaciones ni derechos laborales básicos. Estos trabajadores, que incluyen rebuscadores y cuentapropistas, sobreviven con ingresos promedio de $980.000 mensuales, lo que representa apenas el 42.6% del ingreso de un trabajador formal.
El artículo de Juan Manuel Ospina en El Espectador destaca que la ministra de Trabajo ha sido clara al afirmar que la reforma busca mejorar las condiciones de los trabajadores formalizados, sin abordar la complejidad del sector informal. Esta omisión podría perpetuar las brechas existentes en el mercado laboral y obstaculizar el avance hacia una economía más equitativa y moderna.
Además, Ospina señala que las organizaciones sindicales parecen estancadas en paradigmas de décadas pasadas, sin adaptarse a las transformaciones tecnológicas y económicas que han redefinido el mundo laboral. La mecanización y la automatización han cambiado las dinámicas de empleo, haciendo que el trabajo formal y estable sea cada vez más escaso.
En este contexto, es fundamental que la reforma laboral en Colombia adopte un enfoque más inclusivo, que reconozca y aborde las realidades del trabajo informal. Solo así se podrá avanzar hacia un sistema laboral que garantice derechos y oportunidades para todos los trabajadores, independientemente de su condición contractual.






Comentarios